La habitación perfecta para el descanso de los más guerreros se puede montar de mil maneras distintas. Lo que está claro es que es necesario aprovechar al máximo el espacio y que el dormitorio sea lo más funcional posible. Un colchón de 90 y un somier pueden ser el inicio del diseño de una habitación preparada para los más guerreros de la casa. Después, dependiendo del espacio con el que contamos, utilizaremos los distintos elementos que la complementen. ¿Vemos opciones?

 

Cama individual con colchón de 90

 

Un colchón de 90 para una cama individual es la opción más aconsejable si cuentas con una habitación que permite dar esos centímetros de más al descanso de tu fiera. Si no es posible, los colchones de 80 también son perfectamente adecuados para los dormitorios de niños y niñas e incluso para adolescentes. Esos centímetros de más del colchón de 90, ofrecen un espacio adicional que se agradece, pero que no son imprescindibles.

 

Cuando necesitas aprovechar el máximo espacio para almacenamiento, puedes hacerte con un canapé donde guardar juguetes, ropa de cama, las cosas de la piscina o las de ir de cámping… Otra opción más simple por la facilidad de uso es que la cama tenga cajones en la parte inferior. Aparte de esconderse ahí, tus hijos y tú podréis usarlos para guardar todo lo necesario de manera práctica y cómoda.

 

Para habitaciones de más de uno

 

Literas, camas abatibles, camas gemelas… Cualquiera de estas opciones es una buena solución para un dormitorio infantil o juvenil, dependiendo del espacio con el que cuentes. Las habitaciones infantiles y de adolescentes son un lugar en el que, si hay lugar para el juego, tus hijos pueden pasar mucho tiempo. Asegúrate de ofrecerles los complementos que necesiten en su dormitorio, como un escritorio o un rincón en el que leer y estudiar, pero también todo lo necesario para relajarse con el juego y el movimiento. Ya sabes, mientras más energía gasten durante el día, más y mejor dormirán de noche.

 

Las literas, camas abatibles o las camas individuales de cualquier tipo tienen medidas estándar y se complementan perfectamente con un colchón de 90 o, en su defecto, con colchones de 80. Lo más importante para el descanso, sin embargo, es que el colchón esté fabricado con materiales de buena calidad y, a ser posible, que tenga tratamientos hipoalergénicos, antibacterias y antihongos. Te aconsejamos también que los materiales con los que esté hecho faciliten la transpiración y aseguren la firmeza perfecta para un descanso saludable.

 

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